En la efervescencia del retorno a la democracia en 1983, una publicación surgió para romper todos los moldes, desafiar los tabúes y dar voz a los marginados: “Cerdos y Peces”. Fundada por el escritor y actor Enrique Symns, esta revista se erigió rápidamente como un “símbolo de la contracultura” y su legado, hoy digitalizado, sigue siendo un faro de provocación y libertad intelectual.

Origen en el “Destape Democrático”
La aparición de “Cerdos y Peces” coincidió con la asunción del presidente Raúl Alfonsín y el fin de la dictadura del Proceso de Reorganización Nacional. Nació en un período de efervescencia conocido como el “auge del destape democrático”. Inicialmente se publicó como “suplemento cultural de la revista El Porteño”, pero a partir de abril de 1984 comenzó a editarse de manera independiente. Symns describió su proyecto como un choque frontal contra una “sociedad cómplice de la dictadura, a mi criterio muy moralista”.
Temáticas que Sacudieron lo Establecido
El sello de la revista fue su audaz enfoque en lo prohibido. Se dedicó a publicar “todos aquellos temas considerados tabúes, tales como la homosexualidad, las drogas, el sexo explícito, la prostitución o la pedofilia”. Pero su ambición era mayor: “Cuestionó diversos órdenes de la vida cotidiana, tales como el sistema judicial, la autoridad de la ciencia o la veracidad del sida.”
Sus portadas eran “tan polémicas como sus temas”. Desde el primer número, que bajo el título “¿Legalizar la marihuana?” se declaraba “Suplemento marginoliento de El Porteño”, hasta la tapa del número 18 que mostraba “una mujer en clara posición sexual, con la falda levantada y llevándose un cuchillo a sus partes íntimas”.
El contenido incluía entrevistas a figuras del “rock nacional” como Fito Páez y Los Redondos, al escritor de culto William Burroughs, y otras “de carácter inverosímil”, como una a “Joaquín Lastra: Confesiones de un extraterrestre”. Secciones como “Barriochino”, una “miscelánea sobre rock under y drogas”, se volvieron emblemáticas.
Estilo, Censura y Consecuencias
El estilo de la revista se basaba en “la ironía, el humor y la honestidad total (es decir, sin tapujos)”. La escritura de Symns, en particular, se destacaba por su “prepotencia: un aguijón irresistible y perturbador”.
Este enfoque le valió una feroz persecución. La revista fue “clausurada en por lo menos tres oportunidades diferentes, aun en el gobierno democrático de Raúl Alfonsín; o, en su defecto, comparecer ante tribunales en más de una oportunidad”. Symns relató cómo el cierre de su primera etapa fue por una nota titulada “Hombres que aman a muchachos que aman a hombres”, siendo “denunciados y condenados por ‘apología del delito’”.
El Hombre Detrás del Mito: Enrique Symns
La fuerza impulsora de la revista era Symns, un personaje único descrito como un “buscavidas seductor, un trotamundos con escaramuzas delictivas y, sobre todo, un artista a tiempo completo”. Filósofo autodidacta, aprendió a leer por sus propios medios y desde los doce años, gracias a su hermana, se sumergió en autores como Kant y Heidegger. Sus “cuatro aristas, los cuatro puntales de mi vida” fueron Freud, Nietzsche, Burroughs y Artaud.
Su trabajo, tanto en la revista como en el teatro y la literatura, buscaba “visibilizar las atrocidades cotidianas y a los descastados de siempre. La vida urbana, la noche, los marginados y el lado siniestro son simples flechas que conducen a rincones poco visitados”. Experiencias en el “destape” español y revistas como Ajo Blanco fueron “esenciales en la creación de Cerdos & Peces”.
Legado y Colección Digital
El impacto de “Cerdos y Peces” es incalculable. Se convirtió en un “símbolo de la contracultura en Argentina”, y sus “cincuenta y nueve números pasaron a ser objeto de colección”. Contó con colaboradores destacados como Ricardo Ragendorfer, el Indio Solari (bajo seudónimo), Tom Lupo, Pipo Lernoud, Osvaldo Baigorria, Lalo Mir y Alfredo Rosso.
Tras publicarse con discontinuidad hasta 1998 y tener relanzamientos en 2004 y una “edición histórica a modo de largo adiós” en 2021, su legado se aseguró para las nuevas generaciones: en 2022, el Archivo Histórico de Revistas Argentinas (AHIRA) digitalizó la colección completa y la publicó para descarga gratuita.
La historia de “Cerdos y Peces” y de Enrique Symns es la de una lucha constante por la libertad de expresión sin concesiones. Una publicación que, más que informar, buscaba despertar, incomodar y liberar, consolidando a Symns como una figura transgresora y fundamental para entender la evolución cultural de Argentina.
