- Introducción: Berisso, una Época de Oro Industrial
La “ÉPOCA de ORO 💰 BERISSO” refiere a la historia industrial de la ciudad de Berisso, enfocándose en su “época de oro” impulsada por la industria frigorífica. Esta era dorada, que comenzó en 1904, transformó la ciudad, atrayendo inversiones extranjeras y mano de obra, aunque no sin importantes costos sociales y laborales.
- Los Gigantes Frigoríficos: Swift y Armour
Dos frigoríficos principales que dominaron el paisaje económico de Berisso:
- Swift:
- Orígenes y Cierre: Inaugurado en 1904 como “La Plata Colectora Sociedad Anónima” con capitales sudafricanos, pasó a manos del Swift en 1907, convirtiéndose en “el más importante de la Argentina”. Cerró sus puertas en 1983.
- Escala y Operaciones: El Swift ocupaba “18 hectáreas” y empleaba a “miles de empleados” que se entrecruzaban en más de “150 sectores”, abarcando desde la “alimentación de los animales”, “la matanza”, hasta “conservas”, “embutidos” y “embalaje”.
- Aprovechamiento Integral: Se destacaba por su eficiencia y aprovechamiento total de los recursos. La frase que lo caracterizaba era: “todo se aprovechaba… lo único que se desaprovechó… las vacas no siendo ciertas porque hasta para el sonido de películas era utilizada se usaba todo hasta los pelos de las orejas se convertían en pincel.”
- Película Filmada: En 1958, se filmó una película en sus instalaciones que “fiel a la época muestra el acoso laboral en la mujer y el autoritarismo de los jefes.”
- Armour:
- Orígenes y Cierre: Se instaló en 1915 con “capitales norteamericanos”. Cerró en 1969 y fue demolido en 1985. Su cierre fue “dos años después del cierre del Swift”.
- Condiciones Laborales y Explotación
A pesar del auge económico, las fuentes revelan un lado oscuro de la industria frigorífica: las deplorables condiciones de trabajo.
- Insalubridad e Indignidad: Las personas que trabajaron allí “no quieren ni acordarse de la situación insalubre e indigna de sus tareas.”
- Maltrato y Exigencia: Las condiciones eran “realmente malas”: “controles estrictos sin horarios sin higiene maltratos a hombres mujeres y menores de edad que respondían al mismo ritmo laboral y bajos salarios que el resto.”
- Impacto de las Guerras Mundiales y Capitales Extranjeros
La industria frigorífica de Berisso se benefició enormemente de los conflictos globales:
- Ganancias Extraordinarias: Las empresas tuvieron “ganancias extraordinarias” al “aumentar sus ventas durante la primera y segunda guerra mundial ya que la carne enlatada abastecía los ejércitos.”
- Dependencia Extranjera: La historia de los frigoríficos estuvo “marcada por los capitales extranjeros.”
- Conflictos Laborales y el Origen del Peronismo
Las difíciles condiciones de trabajo y la lucha por los derechos laborales fueron un motor de cambio social y político:
- Luchas Obreras: La vida en los frigoríficos estuvo marcada por “las disputas políticas dentro y fuera de las fábricas y las luchas por los derechos del trabajador.”
- Marchas y Peronismo: Estas situaciones “generaron multitudinarias marchas obreras que partieron a conquistar la plaza de mayo de 1945 determinando así en la calle nueva york de veniso el kilómetro cero del peronismo.” Esto sitúa a Berisso como un punto neurálgico en la historia política argentina.
- La Calle Nueva York: Corazón de Berisso
La Calle Nueva York es presentada como el centro neurálgico de la vida social y económica de Berisso durante su época de oro:
- Centro Comercial y de Recreación: Entre las décadas del 30 y 40, en sus “seis cuadras ofrecía diversas locales comerciales desde los de primera necesidad los de recreación como cine bares restaurantes y los clandestinos como las salas de juegos y los locales nocturnos.”
- Relevancia Histórica: Es un punto de interés clave, mencionado incluso como “el kilómetro cero del peronismo”.
- Desindustrialización y el Legado Actual
Hacia finales de los años 50, la producción comenzó a estancarse, y la falta de inversión llevó al cierre de los frigoríficos, culminando con la demolición de Armour en 1985 y el cierre de Swift en 1983. Este proceso marcó el fin de la “época de oro” industrial de Berisso.